/Reflexion para el 30 de julio 2024/
La lectura de Jeremías 14:17-22 es un lamento por la calamidad que ha caído sobre el pueblo de Israel debido a su pecado y rebelión contra Dios. Jeremías expresa su dolor por la destrucción y la sequía que han afectado a la nación. Aquí está el mensaje central desglosado:
1. Jeremías describe la devastación de la tierra y el sufrimiento del pueblo. El lamento es profundo, reflejando el dolor y la desesperación de la comunidad.
2. Reconoce que la calamidad es consecuencia del pecado y la infidelidad del pueblo hacia Dios. Hay una admisión de culpa y una comprensión de que su sufrimiento es un resultado de su desobediencia.
3. A pesar del reconocimiento de sus fallas, Jeremías suplica a Dios por su misericordia. Pide a Dios que no los abandone y que recuerde su pacto con ellos.
4. Se afirma que Dios es el único que puede traer lluvia y restaurar la tierra. Hay una declaración de fe en el poder y la soberanía de Dios sobre la creación y sobre la situación del pueblo.
El mensaje central para nosotros hoy puede ser visto como una llamada a reconocer nuestras propias faltas, arrepentirnos, y buscar la misericordia de Dios, confiando en su soberanía y capacidad para restaurar y sanar nuestras vidas y comunidades.
La lectura de Mateo 13:36-43 es una explicación de Jesús sobre la parábola de la cizaña en el campo. Aquí está el mensaje central desglosado:
1. Identificación de los Personajes:
– *El que siembra la buena semilla*: Jesús, el Hijo del Hombre.
– *El campo*: El mundo.
– *La buena semilla*: Los hijos del Reino.
– *La cizaña*: Los hijos del maligno.
– *El enemigo que la sembró*: El diablo.
– *La cosecha*: El fin del mundo.
– *Los segadores*: Los ángeles.
2. Separación al Final de los Tiempos: Al final de los tiempos, habrá una separación entre los justos y los malvados. Los ángeles recogerán a los hijos del maligno y los lanzarán en el horno de fuego, donde habrá llanto y rechinar de dientes. Mientras que los justos brillarán como el sol en el Reino de su Padre.
3. Justicia y Juicio Divino: El pasaje enfatiza la justicia y el juicio divino. Dios permitirá que el bien y el mal coexistan en el mundo hasta el fin de los tiempos, pero finalmente habrá un juicio justo donde cada uno recibirá según sus obras.
4. Esperanza para los Justos: Para los justos, hay una promesa de vida eterna y una relación íntima con Dios en su Reino.
El mensaje central para nosotros hoy puede ser una llamada a vivir como hijos del Reino, siguiendo los caminos de justicia y verdad, sabiendo que aunque el mal pueda estar presente en el mundo, Dios tiene un plan y un juicio final donde se establecerá su justicia y se recompensará a los justos. Además, es un recordatorio de la importancia de perseverar en la fe y la rectitud, confiando en la promesa de vida eterna con Dios.
Basado en la lectura de Mateo 13:36-43, nuestro deber se puede resumir en los siguientes puntos:
1. Vivir como Hijos del Reino: Nos llama a vivir de acuerdo con los principios y valores del Reino de Dios, practicando la justicia, la misericordia y la verdad en nuestras vidas diarias.
2. Evitar las Obras del Maligno: Debemos mantenernos alejados de las influencias del mal y no permitir que el maligno nos desvíe de nuestro camino hacia Dios. Esto implica ser conscientes de nuestras acciones y decisiones, y elegir siempre lo que es bueno y justo.
3. Perseverar en la Fe: Aun cuando enfrentemos dificultades y la presencia del mal en el mundo, debemos perseverar en nuestra fe y confiar en el plan de Dios, sabiendo que al final habrá una separación justa entre el bien y el mal.
4. Prepararnos para el Juicio Final: Vivir con la conciencia de que nuestras acciones tendrán consecuencias eternas. Debemos estar preparados para el juicio final, donde seremos recompensados o castigados según nuestras obras.
5. Difundir el Mensaje del Reino: Como hijos del Reino, también tenemos el deber de compartir el mensaje de Jesús con los demás, ayudando a sembrar buena semilla en el mundo y guiando a otros hacia una vida en Dios.
6. Mantener la Esperanza y la Alegría en el Señor: A pesar de las adversidades, debemos mantener la esperanza y la alegría sabiendo que los justos brillarán como el sol en el Reino de su Padre. Esta esperanza debe motivarnos a seguir adelante con fe y determinación.
Cumpliendo estos deberes, estaremos alineados con la voluntad de Dios y preparados para el momento en que su justicia sea plenamente revelada.
Les deseo a cada uno feliz día de la amistad con todas las bendiciones.