La Palabra del domingo1, 13 de octubre 2024
Mc 10,17-30 Sabiduría de Dios expresada en el relato del joven rico
El siguiente y breve análisis narrativo nos puede ayudar a descubrir, desde un análisis literario del texto, la profundidad del mensaje de la Palabra para nuestras vidas de fe que se alimentan de ella.
Pues bien, al rico Jesús le promete la vida eterna si guarda los mandamientos, pero si vive como rico no podrá tener aquí abajo la experiencia del Reino ni sentir la amistad de Jesús2.
Personajes principales que aparecen en el texto:
Jesús: representa y es la sabiduría y la autoridad divina. Sus enseñanzas desafían no solo al joven, sino también a los discípulos y auditores a replantearse sus prioridades y el valor que le dan a las posesiones materiales. (Ver Mt 6,21 “donde está tu tesoro…”; Sl 16,5 “Mi herencia es el Señor…”)
El joven rico: personifica el dilema entre la adhesión a las leyes y el apego a las riquezas. Si bien sigue los mandamientos, le falta de una verdadera disposición a sacrificar su apego por lo material para seguir a Jesús.
Los discípulos: Son testigos y participantes de la conversación entre Jesús y el joven rico. Quedan desconcertados por la enseñanza de Jesús, que contradice la creencia común de que las riquezas eran una señal del favor de Dios.
Lugar, escenario de esta narrativa:
Esta escena ocurre «en el camino», un detalle que puede parecer menor pero tiene un gran simbolismo en el evangelio de Marcos. Jesús está en camino hacia Jerusalén, donde su muerte será el acto final de su vida entre los discípulos y contemporáneos. Esta locación subraya la urgencia del llamado al discipulado y la consecuencia del seguimiento de Cristo.
Vocabulario importante:
Vida eterna: La pregunta del joven está enmarcada en la búsqueda de la vida eterna, una expresión que refleja el deseo de plenitud. En este contexto, Jesús redefine esta plenitud como un don que requiere desprendimiento y una nueva manera de relacionarse con Dios y con los bienes materiales. Por lo demás, para entrar a la vida eterna no antecede el mérito sino que es don gratuito, iniciativa de Dios, amor incondicional de Dios.
2 Castro S., Secundino: El sorprendente Jesús de Marcos. 2ª edición, U. de Comillas, Madrid, 2007
Mandamientos: El joven asegura que ha cumplido los mandamientos «desde joven», lo que pone en evidencia su piedad, pero también una posible confianza excesiva en el cumplimiento legalista, quizás influido por una teología de la retribución, en lugar de un verdadero cambio de corazón que nace como respuesta al amor de Dios que es primero.
Vender todo y dar a los pobres: esta frase de Jesús es un desafío que va más allá del cumplimiento religioso. Jesús le pide al joven un gesto radical de liberación frente a sus bienes, lo que refleja un cambio de vida que prioriza a los demás, especialmente a los más necesitados.
El Reino de Dios: La expresión clave en la respuesta de Jesús es que entrar al Reino de Dios es difícil para los ricos. Esta frase implica un cambio profundo en la forma de entender el poder y las posesiones. La expresión reino de Dios aparece 14 veces en el evangelio de Marcos… dos veces 7 ¡interesante!.
A modo de reflexión:
En Chile y América del Sur existe una gran disparidad económica. Jesús no condena la riqueza en sí, sino el apego a ella. ¿Cómo las riquezas y las desigualdades económicas están afectando las posibilidades de vivir una vida cristiana auténtica, basada en la justicia y la solidaridad?
La invitación de Jesús al joven rico a «vender todo y darlo a los pobres» bien puede verse como un llamado a la solidaridad efectiva. justicia y fraternidad, frente a sistemas que perpetúan la desigualdad y desintegración de la convivencia social.
La vida como camino: Al igual que en el evangelio de Marcos, el contexto de «estar en camino» tiene un peso simbólico. Estamos todos en un camino de conversión, y el Reino de Dios requiere pasos concretos de transformación. ¿cómo podemos entender concretamente estos pasos de transformación? ¿por cuál comenzar?
Finalmente, hay un aspecto teológico clave que es la gracia. Jesús señala que «para los hombres es imposible, pero no para Dios» (Mc 10,27), subrayando que la entrada en el Reino de Dios no es solo cuestión de esfuerzo humano o sacrificio material, sino sobre todo de la gracia de Dios que transforma el corazón (ver Ez 36,26). Es necesario predicar que el Reino de Dios se realiza cuando colaboramos con la gracia para transformar nuestra vida y todo aquello injusto que nos rodea.
Para meditar:
¿Qué pasos concretos podemos dar para vivir como discípulos y discípulas liberados de “apegos” en nuestro camino de seguimiento y conversión?
fuente:
1 Dimensión Animación Bíblica / Provincia de Chile IV/2024 / José Miguel Alvarado, svd
2 Castro S., Secundino: El sorprendente Jesús de Marcos. 2ª edición, U. de Comillas, Madrid, 2007
Dimensión Bíblica SVD Chile